El revoltijo

El Revoltijo.




Profesor: Giancarlo.
Fecha: 20 de Diciembre de 2017.


Efecto:
El espectador elige una carta, la devuelve en la baraja y el mago la revuelve, con grupos de cartas boca arriba alternándose con grupos boca abajo y con un toque mágico consigue que el caos se convierta en orden con todas las cartas de dorso, todas menos la elegida por el espectador.

Desarrollo:
El mago ofrece una carta a un espectador, que la ve y la enseña a todo el público, posteriormente este corta sobre la mano del mago y deposita la carta en el lugar de corte colocando el mago el resto del mazo encima, aprovechando ese momento para controlarla con un break.

Seguidamente, el mago realiza un barajeo por arrastre seguido por un doble corte que hace que la carta elegida esté en la posición superior del mazo, acto seguido pela cartas de una en una logrando situarla en la parte inferior, todo esto lo hace explicando que hay distintos tipos de barajeos y cortes, que incluso puede barajar el espectador, ofreciéndole las cartas para que lo haga y en el momento que este las va a coger, las retira de su mano y dice “¡noooo, mejor no barajees... es que la última vez que ofrecí barajar a alguien me hizo esto....!” y el mago coge un grupito de cartas y las voltea sobre el mazo, y luego otro grupo mas interno y las voltea volteando también las anteriores (que vuelven a estar de dorso) y así sigue  volteando cartas hasta el final de la baraja, generando una sensación de descontrol total y de que hay grupos hacia arriba y grupos de dorso alternados (esto no es cierto, sólo habrá un grupo de cara y otro de dorso).

Como la carta situada en la última posición es precisamente la elegida, en las acciones de volteo de cartas, cuando llega al final, vuelve el último grupo dejando sólo la última sin voltear y la coge de dorso (así no se ve cual es) y la sitúa tranquilamente en la parte superior tapando las cartas que estaban de cara, entonces agrupa la baraja y la deja sobre la mesa.

Continúa su relato indicando que tras la acción que le hizo ese espectador en aquella ocasión, había un descontrol total, unas estaban boca arriba y otras boca abajo y mientras cuenta esto vuelve a coger la baraja para enseñar que efectivamente las hay de dorso (abriendo la baraja por la parte final) y de cara (abriendo la baraja por la parte inicial), e incluso que las hay que están situadas dorso contra dorso, buscando las únicas cartas que están en esta posición, ya que salvo la primera, en la parte superior todas están de cara y en la parte inferior están de dorso.

Al localizar las dos cartas que están dorso contra dorso, desliza la que está en la parte superior y voltea tranquilamente todas las que están sobre ella, quedando la bajara aparentemente igual que estaba, puesto que las cartas de cara ahora están de dorso que es como estaba la carta inicial.

Hecha esta maniobra, el grupo de cartas inferiores sigue de dorso, el de superiores que estaba de cara, también estará de dorso con el volteo final, y la carta inicial que estaba de dorso tapando las que estaban de cara, será la única que quede de cara y además sabemos que esta es la que eligió el espectador.

Una vez explicado el descontrol que hay en la baraja, la volvemos a situar sobre la mesa y explicamos que cuando nos sucedió esto, la única solución que se nos ocurrió fue “recurrir a la magia, así que dí un toquecito mágico sobre las cartas y .... donde había descontrol llegó el orden y todas las cartas volvieron a estar de dorso...” según vamos contando esto se realiza muy lentamente una extensión que confirme que efectivamente ahora hay un orden en las cartas, que no hay ninguna boca arriba, pero mostramos sólo unas poquitas porque sabemos que sí que hay una que está volteada, y entonces decimos “bueno, en realidad no todas las cartas estaban de dorso, hubo una carta que estaba volteada, ¿cuál era tu carta?...” y cuando el espectador dice su carta, se continúa con la extensión hasta que esta aparece volteada “siiii, mírala, aquí está, justo tu carta aparece al revés de las demás ...” y continuamos extendiendo para que se vea que la carta elegida es la única que está cara arriba. Así habremos conseguido dos efectos, el primero transformar el caos en orden y el segundo localizar en medio de ese orden, la carta elegida por el espectador.